martes, 25 de noviembre de 2008

Ya perdoné errores casi imperdonables, traté de sustituir personas insustituibles y olvidar personas inolvidables. Ya hice cosas por impulso, ya me decepcioné con personas cuando nunca pensé decepcionarme, mas también decepcioné a alguien. Ya abracé para proteger, ya me reí cuando no podía, ya hice amigos eternos, ya amé y fui amado, pero también fui rechazado, Ya fui amado y no supe amar. Ya grite y salté de tanta felicidad, ya viví de amor e hice juramentos eternos, pero también di vuelta la cara muchas veces. Ya lloré escuchando música y viendo fotos, ya llamé sólo para escuchar una voz, ya me enamoré por una sonrisa, ya pensé que iba a morir de tanta nostalgia, y tuve miedo de perder a alguien especial (y terminé perdiéndolo) Pero sobreviví; la vida es mucho para ser insignificante.

No hay comentarios: